lunes, 13 de marzo de 2006

Un poema, mucha vida

La distancia, el venir a Zaragoza, el empezar una vida nueva me está viniendo muy bien, empezar de cero, conocer gente nueva.... pero a veces no es suficiente, por eso hoy me recito "en parte" este poema. Es triste, bastante triste y tiene frases frías y duras, no estoy así, no os vayais a alarmar, pero deja poso en mis silencios. Si te quitas una costra abtes de tiempo, la herida vuelve a sangrar.

No creí que nunca fuera a poner aquí un poema, pero cuando lleva tanta vida detrás... ha sido durante mucho tiempo uno de mis poemas favoritos, de un autor desconocido "Modesto calderón Reina" ganador del 5º certamen universitario de la UPM.

Olvida en cuanto puedas aquello que has perdido.
Ciertos fueron los días de inacabables luces,
días sólo sonrisa serenamente pura
en que a un Dios no cambiaras tus horas por sus siglos
pues que una hora con ella los mares sobrepasa.
Ciertos fueron los días pasados y hermosísimos.
Las sombras, sin embargo, ahora te envenenan,
y en arena los mundos que a tu espalda transportas
convierten tu sonrisa maldita por los dioses,
y te miras las manos para ver sólo lineas,
y contemplas los puentes con pasión homicida.
Olvida de inmediato aquello que has perdido.
Pero ¿cómo olvidar que un día te tocaron
los ojos que ni en sueños los dioses imaginan,
cómo olvidar que el tiempo promete ser de nuevo,
que tal vez de sorpresa te encuentras frente a frente
con sus manos, sus labios, su pecho florecido
para ser lo que fuiste en vísperas del frío
para ser lo que fuiste, lo que eres todavía?
Pero olvida enseguida aquello que has perdido.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hay mucha tristeza detrás de esas palabras....espero que no las hagas del todo tuyas...Cuídate.Muak
Be